Reinventa lo clásico con una ‘naked cake’

Carrie Bradshaw dijo una vez que la moda, igual que la política, se dedicaba a reciclar ideas desgastadas y hacerlas parecer frescas e inspiradoras. Como casi siempre, su frase no pudo ser más acertada: las prendas, las canciones y todos los estilos, en general, tienden a volver del pasado para brillar con nueva luz. Por eso, a pesar de la fiebre de los cupcakes, ha resurgido una tendencia nueva en apariencia en materia de tartas nupciales: la naked cake.

Dicho así suena a auténtica vanguardia. Su traducción literal es “tarta desnuda” y, sí, es eso: el bizcocho con crema de toda la vida. El buttercream, el fondant, el azúcar de colores y demás decoraciones azucaradas han invadido hasta tal punto nuestro postres, que muchos han querido volver a la repostería clásica, puede que no tan pomposa a la vista, pero igual de sabrosa, incluso más.

Las naked cake son muy sencillas a la vista y dejan al descubierto todos sus ingredientes. Cada uno de sus pisos suele componerse de un “sandwich” de dos bizcochos desnudos rellenos de nata, crema o chocolate. En su tamaño estándar seguro que has probado alguna: la famosa carrot cake (de zanahoria, de toda la vida), la de calabaza o la red velvet. 

Bizcocho Naked: Un Clásico Redefinido

En lugar de con flores de azúcar, el bizcocho naked se decora con frutas, un ornamento tan sabroso como natural y muy sano. Las fresas, la piña, los kiwis, las cerezas, frescas o confitadas, aportan color y vida al pastel sin necesidad de artificios químicos.

Algunas son completamente nudistas, bizcocho y relleno completamente a la vista, sólo ataviadas con la estatuilla de los novios. Otras se recubren de caramelo, frutos secos picados, o de chocolate duro o en polvo, en algunos casos para simular la tierra bajo alguna fruta.

Si quieres ser original y salirte del típico bizcocho relleno, puedes optar por sabores algo más inusuales como el oreo, la cheescake o, por qué no, la cerveza negra -pruébala, su sabor te sorprenderá-.

Antes de decidirte por un sabor, consulta pastelerías expertas y especializadas en bodas, como Sweet Mama, Bocaditos Dulces y Stravaganza Cakes, en España, o Doux Mélange,  Pastelería La Migaja y Tarte D´Art en México. Explícales la idea de simplicidad que tienes en mente y ellos harán tu sueño realidad, una tarta que solo esconderá un secreto: su sabor.

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